Agencia Peruana de Noticias PRENSAPERU.PE https://www.prensaperu.pe Twitter: @prensaperupe El Gobierno del Perú ha oficializado, mediante el Decreto Supremo N.° 141-2025-PCM, la Política General de Gobierno 2025–2026, titulada “Transición Democrática y Reconciliación Nacional” —un instrumento normativo y estratégico que orientará todas las acciones del Poder Ejecutivo hasta julio de 2026, momento en que concluirá el período de gestión actual. Aprobada en la última sesión del Consejo de Ministros, esta política se concibe como un marco integral que busca dar respuesta a los retos más acuciantes del país, articulando prioridades en cuatro ejes estratégicos y 27 lineamientos operativos que definen el rumbo estatal en materia de seguridad, economía, democracia y cohesión social.

PRIMER EJE ESTRATÉGICO: FORTALECIMIENTO DEL ORDEN PÚBLICO, SEGURIDAD CIUDADANA Y DEFENSA DE LA SOBERANÍA NACIONAL

El primer pilar de la política se centra en consolidar el orden público como base indispensable para cualquier proceso de desarrollo. En este sentido, se prioriza la consolidación de la inteligencia operativa del Estado mediante la cooperación transversal entre los órganos del Sistema de Inteligencia Nacional (SIN), lo que permitirá anticipar amenazas y actuar con mayor precisión en la lucha contra la delincuencia. Entre las acciones clave se encuentran la reducción drástica de delitos de alto impacto —como la extorsión, el robo con violencia y el tráfico de drogas—, así como la erradicación de economías ilícitas que alimentan el crimen organizado.

Asimismo, el eje contempla el fortalecimiento de la seguridad en zonas de frontera —espacios especialmente vulnerables a actividades ilícitas como el contrabando, el tráfico de personas y el narcotráfico— mediante la mejora de la dotación tecnológica y humana de las fuerzas de seguridad. Se busca, además, debilitamiento estructural del crimen organizado a través de operativos conjuntos entre la Policía Nacional del Perú (PNP) y las Fuerzas Armadas, así como el restablecimiento de la capacidad disuasiva de estas instituciones, garantizando que el Estado mantenga el monopolio de la fuerza y proteja los derechos de la población.

SEGUNDO EJE ESTRATÉGICO: CRECIMIENTO ECONÓMICO Y DESTRABE DE INVERSIONES

El segundo eje se orienta a reactivar la economía peruana y crear condiciones propicias para el desarrollo sostenible, centrándose en la promoción de la inversión privada en sectores estratégicos como la minería, la energía, la agricultura y el turismo. Para ello, el Gobierno busca simplificar trámites administrativos, mejorar la calidad de la regulación y reducir la incertidumbre para inversionistas nacionales e internacionales —pasos fundamentales para atraer recursos que generen empleo y riqueza.

Además, el eje contempla la mejora y expansión de la conectividad a nivel nacional, tanto física (carreteras, ferrocarriles, aeropuertos) como digital (internet de alta velocidad), ya que la falta de conectividad limita el acceso a mercados y servicios en zonas rurales y fronterizas. Se prevé la ejecución de proyectos de infraestructura productiva —como obras hidráulicas, plantas energéticas y centros logísticos— que impulsen la productividad, especialmente en zonas de frontera, con el objetivo final de mejorar la calidad de vida de la población y reducir las brechas regionales.

TERCER EJE ESTRATÉGICO: TRANSICIÓN DEMOCRÁTICA ORDENADA Y FORTALECIMIENTO DE LA INSTITUCIONALIDAD

El tercer pilar es fundamental para garantizar la continuidad del régimen democrático y el funcionamiento eficaz del Estado. Entre sus principales lineamientos se encuentra la promoción de condiciones óptimas para la realización de elecciones generales en 2026 —incluyendo el fortalecimiento del organismo electoral, la garantía del voto libre y el acceso a la información para la ciudadanía. Asimismo, se busca avanzar hacia un Estado moderno, predecible y confiable, mediante la reforma de instituciones públicas, la mejora de la gestión del gasto público y la lucha contra la corrupción.

Un elemento clave de este eje es el fortalecimiento del diálogo y la concertación entre los poderes del Estado (Ejecutivo, Legislativo y Judicial), el sector privado, los actores políticos y sociales, y la ciudadanía en general. Se pretende construir un espacio de consenso para abordar los retos nacionales, evitando la polarización y promoviendo la participación ciudadana en la toma de decisiones públicas —elementos esenciales para consolidar la democracia y la confianza en las instituciones.

CUARTO EJE ESTRATÉGICO: RECONCILIACIÓN NACIONAL Y ATENCIÓN A POBLACIONES VULNERABLES

El cuarto eje se centra en promover la reconciliación nacional y reducir las desigualdades sociales, priorizando la atención a las poblaciones más vulnerables del país. Para ello, se contemplan acciones para garantizar el acceso universal y de calidad a los servicios básicos —salud, educación, vivienda y agua potable—, especialmente en zonas rurales y con alta índice de pobreza. Asimismo, se busca mejorar la seguridad alimentaria y nutricional, mediante la promoción de la agricultura familiar, la distribución de alimentos y la educación nutricional.

Otro punto fundamental es el refuerzo de la articulación del Estado para contribuir de manera más eficiente al desarrollo infantil temprano y a la protección integral desde la gestación —espacios clave para romper el ciclo de pobreza y garantizar el futuro del país. La reconciliación nacional se concibe, en este marco, como un proceso de construcción de paz social, basado en el respeto a los derechos humanos, la memoria histórica y la inclusión de todos los sectores de la población.

Con la aprobación de esta Política General de Gobierno, el Ejecutivo reafirma su compromiso con una transición ordenada, medible y orientada a resultados, fortaleciendo la predictibilidad del Estado y la confianza de la ciudadanía en las instituciones. Se busca que cada acción estatal se alinee con estos cuatro ejes, generando un impacto positivo en la vida de los peruanos y construyendo un país más justo, seguro y próspero.

CONCLUSIONES

1.- Eje de Seguridad y Soberanía: El fortalecimiento de la inteligencia operativa y la cooperación entre fuerzas de seguridad busca restablecer el orden público, erradicar economías ilícitas y proteger las fronteras, consolidando el monopolio de la fuerza del Estado.
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2.- Eje de Economía y Inversiones: La promoción de la inversión privada, la mejora de la conectividad y la ejecución de infraestructura productiva buscan reactivar el crecimiento económico y reducir brechas regionales, mejorando la calidad de vida de la población.
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3.- Eje de Democracia y Institucionalidad: La garantía de elecciones ordenadas, la reforma de instituciones y el fortalecimiento del diálogo multisectorial buscan consolidar la transición democrática y construir un Estado moderno, predecible y confiable.
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4.- Eje de Reconciliación y Vulnerabilidad: El acceso universal a servicios básicos, la seguridad alimentaria y el apoyo al desarrollo infantil temprano buscan promover la reconciliación nacional y reducir desigualdades, incluyendo a las poblaciones más marginadas.

Fuente: Agencia Peruana de Noticias PRENSAPERU.PE https://www.prensaperu.pe Twitter: @prensaperupe

English Translation
Government formalizes General Policy 2025-2026: “Democratic Transition and National Reconciliation in Four Pillars and 27 Guidelines”.

Peruvian News Agency PRENSAPERU.PE https://www.prensaperu.pe Twitter: @prensaperupe The Government of Peru has formalized, through Supreme Decree No. 141-2025-PCM, the General Government Policy 2025–2026, entitled “Democratic Transition and National Reconciliation”—a regulatory and strategic instrument that will guide all actions of the Executive Branch until July 2026, when the current term ends. Approved at the last meeting of the Council of Ministers, this policy is conceived as a comprehensive framework that seeks to address the country’s most pressing challenges, articulating priorities across four strategic pillars and 27 operational guidelines that define the state’s course in matters of security, the economy, democracy, and social cohesion.

FIRST STRATEGIC PILLAR: STRENGTHENING PUBLIC ORDER, CITIZEN SECURITY, AND DEFENSE OF NATIONAL SOVEREIGNTY

The first pillar of the policy focuses on consolidating public order as an indispensable foundation for any development process. In this regard, priority is given to strengthening the State’s operational intelligence through cross-cutting cooperation among the agencies of the National Intelligence System (SIN), which will allow for anticipating threats and acting with greater precision in the fight against crime. Key actions include the drastic reduction of high-impact crimes—such as extortion, armed robbery, and drug trafficking—as well as the eradication of illicit economies that fuel organized crime.

This strategic pillar also includes strengthening security in border areas—areas particularly vulnerable to illicit activities such as smuggling, human trafficking, and drug trafficking—by improving the technological and human resources of the security forces. It also seeks to structurally weaken organized crime through joint operations between the Peruvian National Police (PNP) and the Armed Forces, as well as restoring the deterrent capacity of these institutions, ensuring that the State maintains its monopoly on the use of force and protects the rights of the population.

SECOND STRATEGIC PILLAR: ECONOMIC GROWTH AND UNLOCKING INVESTMENTS

The second pillar focuses on reactivating the Peruvian economy and creating favorable conditions for sustainable development, emphasizing the promotion of private investment in strategic sectors such as mining, energy, agriculture, and tourism. To achieve this, the Government seeks to simplify administrative procedures, improve the quality of regulation, and reduce uncertainty for national and international investors—fundamental steps to attract resources that generate employment and wealth.

Furthermore, this strategic pillar includes improving and expanding connectivity nationwide, both physical (roads, railways, airports) and digital (high-speed internet), since a lack of connectivity limits access to markets and services in rural and border areas. The plan anticipates the implementation of productive infrastructure projects—such as hydraulic works, power plants, and logistics centers—that will boost productivity, especially in border regions, with the ultimate goal of improving the population’s quality of life and reducing regional disparities.

THIRD STRATEGIC PILLAR: ORDERLY DEMOCRATIC TRANSITION AND STRENGTHENING OF INSTITUTIONS

The third pillar is fundamental to guaranteeing the continuity of the democratic system and the effective functioning of the State. Among its main guidelines is the promotion of optimal conditions for holding general elections in 2026—including strengthening the electoral body, guaranteeing free and fair elections, and ensuring citizens’ access to information. It also seeks to move toward a modern, predictable, and reliable State through the reform of public institutions, improved public spending management, and the fight against corruption.

A key element of this pillar is strengthening dialogue and consensus-building among the branches of government (Executive, Legislative, and Judicial), the private sector, political and social actors, and the general public. The aim is to build a space for consensus to address national challenges, avoiding polarization and promoting citizen participation in public decision-making—essential elements for consolidating democracy and trust in institutions.

FOURTH STRATEGIC AXIS: NATIONAL RECONCILIATION AND SUPPORT FOR VULNERABLE POPULATIONS

The fourth axis focuses on promoting national reconciliation and reducing social inequalities, prioritizing support for the country’s most vulnerable populations. To this end, actions are planned to guarantee universal and quality access to basic services—health, education, housing, and drinking water—especially in rural areas and those with high poverty rates. Likewise, efforts are underway to improve food and nutritional security through the promotion of family farming, food distribution, and nutritional education.

Another fundamental point is strengthening the State’s role in contributing more effectively to early childhood development and comprehensive protection from conception—key areas for breaking the cycle of poverty and ensuring the country’s future. National reconciliation is conceived, within this framework, as a process of building social peace, based on respect for human rights, historical memory, and the inclusion of all sectors of the population.

With the approval of this General Government Policy, the Executive Branch reaffirms its commitment to an orderly, measurable, and results-oriented transition, strengthening the predictability of the State and citizens’ trust in institutions. The goal is for every state action to align with these four pillars, generating a positive impact on the lives of Peruvians and building a more just, secure, and prosperous country.

CONCLUSIONS

1.- Security and Sovereignty Pillar: Strengthening operational intelligence and cooperation among security forces aims to restore public order, eradicate illicit economies, and protect borders, consolidating the State’s monopoly on the use of force.

2.- Economy and Investment Pillar: Promoting private investment, improving connectivity, and implementing productive infrastructure projects seek to reactivate economic growth and reduce regional disparities, improving the population’s quality of life.

3.- Democracy and Institutional Framework: Guaranteeing orderly elections, reforming institutions, and strengthening multi-sectoral dialogue aim to consolidate the democratic transition and build a modern, predictable, and reliable state.

4.- Reconciliation and Vulnerability Framework: Universal access to basic services, food security, and support for early childhood development seek to promote national reconciliation and reduce inequalities, including for the most marginalized populations.

Source: Peruvian News Agency PRENSAPERU.PE https://www.prensaperu.pe Twitter: @prensaperupe