Agencia Peruana de Noticias PRENSAPERU.PE https://prensaperu.pe/ Twitter: @prensaperupe Primeras palabras de su mensaje al parlamento peruano de la jefe de Estado Dina Boluarte Zegarra, permítame, señor Presidente, seguir el hilo que nos llevó a hacernos cargo de un país semiderruido. Tras el golpe de Estado la situación nacional derivó, rápidamente, en una grave convulsión social cuyo objetivo, ahora sin duda alguna, fue derrocar al nuevo Gobierno y reemplazar nuestra democracia por una dictadura.
El plan estuvo claramente dirigido a dañar o destruir valiosos activos críticos, como aeropuertos, puentes, carreteras, comisarías, locales del Ministerio Público y de tribunales de justicia para aislar a importantes regiones del Sur.
EL COSTO DEL DAÑO FUE INMENSO
Según los registros de la Defensoría del Pueblo, se produjeron 1,261 “acciones colectivas de protesta”, algunas de las cuales fueron verdaderas asonadas.
Fallecieron 61 civiles, 49 en enfrentamientos directos con las fuerzas del orden y 11 en el curso de bloqueos de vías. En esas circunstancias murieron también 7 efectivos de las fuerzas del orden /1 policía y 6 militares)
Declaro nuevamente – y con mucho dolor – que el saldo de víctimas y heridos es un lamentable resultado que nadie quiso. Con profunda y dolorosa consternación, pido perdón, en nombre del Estado, a los deudos de todos los fallecidos, civiles, policías y militares y también a los heridos, y mantengo mi compromiso, junto a los funcionarios y autoridades, de allanarme totalmente y cooperar con el trabajo que, conforme a ley, está realizando el Ministerio Público. No habrá impunidad para nadie en este caso.
No hay forma de reparar ni devolver la vida. Eso lo tenemos claro. No obstante, para resarcir en algo la irreparable dimensión de la pérdida de sus seres queridos y las lesiones sufridas por los heridos, mi Gobierno dispuso una ayuda integral en favor de los deudos y los afectados. Por intermedio del Ministerio de Justicia, ha otorgado beneficios económicos excepcionales a 111 deudos de 63 personas fallecidas. También, 155 personas que sufrieron lesiones graves han recibido apoyo económico excepcional.
Con sinceridad, señor Presidente, declaro que para mi Gobierno en esa fecha no hubo vencedores ni vencidos. La democracia permite el derecho a la protesta pacífica, pero la democracia también permite y reclama diálogo. Por ello, anuncio que relanzaremos el Acuerdo Nacional, incorporando a todos los sectores sociales, a fin de dialogar en dicho foro sobre sus banderas, sobre la agenda social y las reformas políticas que están pendientes en nuestro país.
Llamo a la gran RECONCILIACIÓN NACIONAL entre todos los peruanos, con la certeza de que ninguna diferencia ideológica o de opinión, por profunda e intensa que esta sea, puede llevarnos a convivir en una sociedad de enemigos regidos por antagonismos innecesarios e irreconciliables.
Llamo a la RECONCILIACIÓN NACIONAL, sabiéndonos frutos de un mismo árbol enraizado en este suelo bendito, regado en su defensa por la sangre de nuestros héroes y mártires.
Llamo a unirnos y a tolerarnos en la coincidencia y en la diversidad, asumiendo siempre el respeto irrestricto al derecho de los demás.
Nuestra gran historiadora, hoy mujer universal, María Rostworowski, reflexionó en algún momento sobre el Perú y dijo que nuestro país vivía “una crisis dolorosa”, pero, al mismo tiempo, estaba convencida que “después de la crisis saldrá un Perú nuevo e integrado”
Fuente: Agencia Peruana de Noticias PRENSAPERU.PE https://prensaperu.pe/ Twitter: @prensaperupe
English translation
Dina Boluarte: “I propose a reconciliation pact, and I apologize, on behalf of the State to the relatives of all the deceased”.
Peruvian News Agency PRENSAPERU.PE https://prensaperu.pe/ Twitter: @prensaperupe First words of your message to the Peruvian parliament from the head of State Dina Boluarte Zegarra, allow me, Mr. President, to follow the thread that led us to take over of a semi-ruined country. After the coup d’état, the national situation quickly led to a serious social upheaval whose objective, now without a doubt, was to overthrow the new government and replace our democracy with a dictatorship.
The plan was clearly aimed at damaging or destroying valuable critical assets, such as airports, bridges, highways, police stations, offices of the Public Ministry and courts of justice to isolate important regions of the South.
THE COST OF THE DAMAGE WAS IMMENSE
According to the records of the Ombudsman’s Office, 1,261 “collective protest actions” took place, some of which were true riots.
61 civilians died, 49 in direct confrontations with the forces of order and 11 during roadblocks. In these circumstances, 7 members of the security forces / 1 police officer and 6 soldiers also died)
I declare once again – and with great pain – that the balance of victims and wounded is an unfortunate result that nobody wanted. With deep and painful consternation, I apologize, on behalf of the State, to the relatives of all the deceased, civilians, police and military, and also to the injured, and I maintain my commitment, together with the officials and authorities, to fully accept and cooperate with the work that, in accordance with the law, is being carried out by the Public Ministry. There will be no impunity for anyone in this case.
There is no way to repair or restore life. That is clear to us. However, to somewhat compensate the irreparable extent of the loss of their loved ones and the injuries suffered by the injured, my Government ordered comprehensive aid in favor of the bereaved and those affected. Through the Ministry of Justice, it has granted exceptional economic benefits to 111 relatives of 63 deceased persons. Also, 155 people who suffered serious injuries have received exceptional financial support.
With sincerity, Mr. President, I declare that for my Government on that date there were no winners or losers. Democracy allows the right to peaceful protest, but democracy also allows and calls for dialogue. For this reason, I announce that we will relaunch the National Agreement, incorporating all social sectors, in order to dialogue in said forum about their flags, about the social agenda and the political reforms that are pending in our country.
I call for great NATIONAL RECONCILIATION among all Peruvians, with the certainty that no ideological or opinion difference, no matter how deep and intense it may be, can lead us to live together in a society of enemies governed by unnecessary and irreconcilable antagonisms.
I call for NATIONAL RECONCILIATION, knowing that we are the fruits of the same tree rooted in this blessed soil, watered in its defense by the blood of our heroes and martyrs.
I call to unite and tolerate each other in coincidence and diversity, always assuming unrestricted respect for the rights of others.
Our great historian, today a universal woman, María Rostworowski, reflected at some point on Peru and said that our country was experiencing “a painful crisis”, but, at the same time, she was convinced that “after the crisis a new and integrated Peru will emerge.” ”
Source: Peruvian News Agency PRENSAPERU.PE https://prensaperu.pe/ Twitter: @prensaperupe